El reconocido constitucionalista complutense, Dr. Italo Antinori
Bolaños, nos regala desde Panamá, este nuevo y corto análisis, con profundas y
genuinas reflexiones que nos motivan a meditar sobre el futuro de la humanidad
y sobre la posibilidad de una conflagración mundial que llegue a afectar
terriblemente al mundo. Es un potente y
lúcido análisis, que acaba de producir tan admirado académico, que bien vale la
pena leer, profundizar y analizar.
Unas
cortas reflexiones de septiembre de 2017, en 360 palabras
Escrito del Dr. Italo Antinori Bolaños
No sé si será porque en pocos días cumplo
años y para estas fechas, del mes de septiembre, hay nostalgias
infinitas que se acumulan en el alma… Pero un comentario que me hizo mi esposa
María Eugenia, sobre la coincidencia de los fenómenos naturales, me ha hecho preguntarme
definitivamente, si todos los concurrentes y malévolos fenómenos naturales que
están aconteciendo casi simultáneamente desde finales de agosto y en el
presente mes de septiembre (matando a tanta gente y sembrando destrucción), ¿no
será un grito de protesta de la naturaleza debido a la última prueba nuclear con la poderosa bomba de
hidrógeno que hizo el desquiciado dictador de Corea del Norte, Kim Jong-un?
No nos parece casual el
terremoto ocurrido en las islas Ogasarawa en Japón (también conocidas como
Bonin) el 8 de septiembre de 6.1 grados; el devastador terremoto la noche del 7
de septiembre de 2017, en Chiapas, México de 8.2 grados (el más potente en los
últimos 100 años en ese país); el
huracán Harvey que, sin piedad destrozó Houston, Texas; el huracán Irma que ha
hecho estragos – y desgraciadamente mientras escribo aún no termina – en diversas
islas del Caribe. Ahora se ha desatado
un nuevo huracán llamado José, que aseguran que sigue los pasos del huracán
Irma, que amenaza con matar más personas y con provocar otros desastres
materiales. ¿Qué ocurre en el mundo? ¿Será
que estamos dándole la espalda a Dios y a sus divinas enseñanzas? ¿Será que en
vez de vivir en paz, estamos empeñados en apuntar hacia la destrucción de la humanidad,
buscando la conflagración mundial, con
el uso de la energía atómica para fines destructivos, desatando efectos
adversos en la naturaleza?
Hace años, en 1994, desde Suiza
donde entonces residíamos mi esposa y yo, escribí una columna que fue publicada
en Panamá en el Diario “La Estrella de Panamá”, donde dije que la humanidad no
se acabaría ni por fuegos ni por grandes cataclismos, sino por culpa del ser
humano que está afanosamente empeñado en una loca carrera por destruirla…
8 de septiembre de 2017.
Doctor en
Derecho (Especializado en Derecho Constitucional)
Universidad
Complutense de Madrid, Reino de España
Primer Defensor
del Pueblo de la República de Panamá (1997-2001)
Es muy atinado y oportuna esta reflexión. El ser humano cada dia va perdiendo la conciencia y se conviete en un ser perverso q solo actua impulsado por la ambición y el ego desmedido.
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