El Dr. Italo Antinori Bolaños, una de las mentes más preclaras y
reconocidas de América Central, hace una puntual aclaración sobre su
participación en un programa de televisión de la República de Panamá. La Verdad Hispanoamérica que tiene un gran
respeto y admiración por tan brillante jurista, pensador y escritor, se siente
orgullosa de poder publicar su aclaración.
Dr. Italo Antinori B. iantinorib@cwpanama.net |
ANTE LA TERGIVERSACIÓN: ACLARACIÓN
NECESARIA
El suscrito Dr. Italo Isaac
Antinori Bolaños, aclara lo siguiente con relación al programa de Telemetro
Reporta el martes 6 de febrero de 2018, referente al matrimonio entre personas
del mismo sexo:
1. El martes 6 de febrero de 2018 fui entrevistado en el
Programa Telemetro Reporta, Canal 13 que dirige el periodista Alvaro Alvarado.
Después de ese programa, elementos del lobby gay, desataron casi al unísono una
orquestada campaña de tergiversaciones sobre el contenido de lo declarado, de
ataques e insultos (con incalificables epítetos haca mi persona), que van desde
cavernícola, dinosaurio, que Hitler regresó y "preñó" a mi madre, retrasado y hasta vergüenza
nacional – sin echar a un lado algunas amenazas a nuestra seguridad física, enviadas
a nuestro correo electrónico – todo esto solo por ejercer el derecho de expresar
nuestro punto de vista a favor del único matrimonio que entendemos: el de un
hombre con una mujer.
2. No olvidemos que ya en marzo del 2006 la
denominada “Asociación de Hombres y
Mujeres Nuevos de Panamá,” (colectivo pro gay) nos atacó al emitir una
resolución irrespetuosa en la que le solicitaban a la Asamblea Nacional que no
volviera a escoger a un Defensor del Pueblo como el suscrito “para que no se vuelva jamás a repetir una
situación tan vergonzosa como aquella que se dio con el anterior Defensor del
Pueblo, Italo Antinori Bolaños, quien públicamente manifestase su
no-reconocimiento a los derechos humanos y civiles de gays y lesbianas
argumentando creencias religiosas”. No
contentos con dicho ataque en el Diario La Estrella de Panamá del domingo, 29
de mayo de 2011, volvieron a ofender nuestra dignidad al calificarnos como
“dinosaurios”.
3. En esta ocasión y después del programa en el que
fuimos entrevistados el martes 6 de febrero de 2018, de los insultos y amenazas
han pasado a la novedosa práctica de tergiversar los conceptos que emitimos en
la entrevista, poniendo incluso frases entre comillas como supuestas citas
textuales que nunca dije en dicho programa.
Por toda esta campaña perversa de ataques, amenazas y mentiras, resulta
obligante aclarar algunos aspectos medulares:
a. Ninguno de los que han disentido de los conceptos que
expusimos para rechazar el matrimonio entre personas del mismo sexo, ha logrado
refutar el contenido y sentido de nuestros argumentos jurídicos, sino que han
recurrido al insulto, la infamia, el irrespeto soez, la mentira y a la
tergiversación de conceptos que dijimos o expresamos en la aludida entrevista, fomentando
el ataque furibundo e implacable y el linchamiento mediático contra mi persona
por las redes sociales.
b. Es falso que en la entrevista haya puesto a Venezuela
como ejemplo político ni tampoco como un sistema político ideal, como
falsamente han llegado a sostener. Lo que hice fue responder una pregunta puntual
del periodista Álvaro Alvarado en cuanto a qué países habían abandonado la Convención
Americana sobre Derechos Humanos, vale decir, Trinidad y Tobago y Venezuela. Es
deshonesto tergiversar el sentido de lo que uno ha explicado por razón de una
pregunta donde solo me limité a señalar cuáles habían sido los dos países que
se habían salido de la Convención Americana sobre Derechos Humanos y cuál había
sido el procedimiento empleado. No podía omitir a ninguno, porque hacerlo
significaba imprecisión o desconocimiento
académico de la verdad. Es posible constatar que lo que decimos es lo verdadero
y lo que ellos han dicho es falso y constituye una burda manipulación de la
verdad si buscan entre el minuto 27:10 a
28:15, en la grabación del programa que podemos apreciar en la siguiente dirección:
c. Lamentablemente, algunos periodistas (no todos) al
servicio del lobby gay han aseverado, tergiversado y sacado de contexto partes
de mis declaraciones lo cual es deshonesto, por lo que su grado de credibilidad
se afecta, cuando usted puede comprobar en la grabación (cuyo vínculo señalamos
anteriormente) que lo aseverado por ellos, no fue así. Lo irónico es que
algunos de ellos, quizá no habían nacido o estaban muy pequeños cuando me
jugaba la vida rescatando a un panameño en las montañas de Colombia, secuestrado
en manos de grupos guerrilleros, en defensa del derecho humano más importante
que es la vida, cuya historia ocurrida el 9 de junio de 2000, la han subido
algunos ex alumnos del suscrito a YouTube y puede verse en:
d. Poco les ha importado a ellos recordar cómo luchamos
contra viento y marea por instalar una moderna defensoría que no existía cuando
fui elegido el 27 de junio de 1997 – y que mis sucesores han hecho inoperante –
en mi propia casa donde funcionó durante los primeros seis meses con recursos
propios, así como con recursos propios pagué la remodelación de las primeras
oficinas. Y ahora éstos que todavía
gateaban cuando el suscrito luchaba, se atreven a decir que soy un “cavernícola”, “vergüenza nacional” o “desconocedor de los derechos humanos”, solo por no
estar de acuerdo con el matrimonio gay.
e. Respecto a
nuestro comentario/respuesta al señor Procurador de la Administración y
principal defensor del lobby gay en Panamá, Rigoberto González, debo recordar
que fue el señor González el que primero se refirió a mi persona en el mismo
programa de Alvaro Alvarado el viernes 2 de febrero repitiendo la falsedad que
días antes él había ayudado a esparcir, de que el suscrito le había dicho
“desquiciado” y que “estaba por encima de mis ofensas” porque habíamos sido
amigos cuando estudiábamos el doctorado en derecho constitucional en
Madrid. En mi respuesta aclaratoria a sus comentarios,
emitidos en la entrevista del martes 6 de febrero de 2018, aclaré que nunca le
había dicho “desquiciado” como él falsamente aseguraba y aclaramos que en
nuestro análisis (y así se puede constatar) nos habíamos referido a que era “desquiciada”
la idea de imponer el matrimonio gay en Panamá, no a su persona. Con relación a su comentario, en efecto manifesté
que habíamos sido amigos cuando estudiábamos juntos en Madrid (estuvo viviendo
en mi apartamento algunos meses porque no tenía a donde vivir) y que me había
dolido como compañero cuando fracasó en su intento de ser doctor pero que me
alegraba que lo hubiera logrado 20 años después en la USMA. No nos llamemos a engaños, el fracaso no es una virtud ni debe
ser una presea a exhibir en el expediente académico de nadie. Promover o
intentar justificar el fracaso académico, equivale a fomentar sociedades
mediocres y una verdadera “ineptocracia”.
Siendo el señor Rigoberto González, profesor universitario, resulta
imperativo preguntarse, ¿con qué autoridad puede el señor Rigoberto González,
exigir a sus alumnos que sean aplicados y reclamar excelencia académica, si él
es el ejemplo de quien fue a estudiar y fracasa? O es que ahora el lobby gay ha hecho que las
cosas cambien y se entiendan al revés y habrá que premiar y homenajear a los
fracasados… ¿Es esto correcto? Entonces,
según los nuevos conceptos y cánones impuestos por el colectivo LGBT, hay que
linchar mediáticamente al que, con responsabilidad, orden y sacrificios, sí
logró el Doctorado en Derecho Constitucional con honores (en la misma
Universidad y carrera en la que el otro fracasó) y quien ha cometido la
terrible osadía de desenmascarar el
fracaso académico de Rigoberto González – quien como buen fariseo esgrime poses
de sabihondo y erudito – para sembrar mentiras y confundir a la ciudadanía
asegurando que la opinión de la Corte Interamericana de Derechos Humanos es
vinculante, mientras convenientemente esconde su vergonzoso pasado académico,
lo cual es una deshonra en cualquier país serio del mundo, más aún por la alta
posición que el señor Rigoberto González ocupa. Como los valores están trastocados habrá que
hacerle un homenaje al señor González por su “extraordinario” pasado académico
y poner al suscrito en una pira
incendiaria en la Plaza Cinco de Mayo, solo por decir la verdad académica que
el otro deshonestamente ha ocultado y por no estar de acuerdo con la legalización
del matrimonio entre parejas del mismo sexo. ¿Será que está prohibido decir la
verdad y oponernos al matrimonio gay porque ello nos convierte automáticamente
en “homofóbico”, “hijo de Hitler porque
éste regresó y preñó a tu madre”, “violador de Derechos Humanos”, “retrógrado”, “cavernícola”,
“dinosaurio” y demás insultos y epítetos? Me he llegado a preguntar en mis
profundas meditaciones ¿cómo y con qué autoridad académica el Señor Rigoberto
González, flamante presidente del Pacto de Estado por la Justicia, puede
revisar el currículum académico y hacer interrogatorios a los candidatos a
Magistrado de la Corte Suprema de Justicia, si su currículum académico exhibe
un vergonzoso fracaso, que es el ejemplo de quien fue a estudiar y por no ser
aplicado, no logró su doctorado?
f. El
Procurador de la Administración parece ser la alta autoridad del Estado
escogida por el colectivo LGBT para intentar lograr a toda costa, la aprobación
del matrimonio entre personas del mismo sexo valiéndose de subterfugios, malas
interpretaciones constitucionales y falsos conceptos emitidos en los medios –
aprovechándose de su alta posición – en la que confunde a las personas
aseverando que es obligante para el país lo que es meramente una opinión
consultiva que emitió la Corte Interamericana de Derechos Humanos y que de
ninguna manera tiene carácter vinculante, como falsamente el Procurador ha
pretendido vender a todo un país. Para este avieso propósito estos colectivos gays y pro gays, son los que
pretenden resaltar el pensum académico del Procurador que es quien emite los
errados conceptos para confundir a los ciudadanos. Por ello, en el programa del 6 de febrero en el que participé,
nos vimos compelidos a aclarar jurídicamente, cada una de sus mentiras, con
cuadros explicativos donde transcribimos las disposiciones legales que muy
convenientemente han sido amañadas u omitidas para engañar al pueblo por el
señor Rigoberto González con sus parcializadas interpretaciones. Incluso ha escondido que la propia Corte
Interamericana de Derechos Humanos en 1982 (OC-24/82 de 24 de septiembre de
1982) ya había aclarado que las opiniones consultivas no son obligantes,
porque no surgen de un proceso contencioso (litigio) ni de una sentencia.
g. Algunos elementos del lobby gay se han dedicado a
tergiversar lo que manifesté en la entrevista de televisión en cuanto a que, el
ser humano nació de un hombre y una mujer, creamos o no en Adán y Eva, pero la
existencia humana (la vida) fue posible y se produjo cuando un espermatozoide de
un varón, se unió al óvulo de una mujer. En ese contexto cité el caso de Adán y Eva,
como ejemplo de que solo un hombre y una mujer – cualquiera que hubiese sido su
nombre – hicieron posible el inicio de la especie humana, pero no es cierto que
haya dicho lo que falsamente, incluso, ponen entre comillas para hacerle ver a
los demás que lo he dicho textualmente. Ellos han esparcido de manera falsa que dije: “Dios creó a Adán y Eva pero
esto no tiene nada que ver con religión”, una frase entre comillas que nunca
dije, porque son maestros de la mentira, la simulación y el engaño. Lo que realmente expresamos textualmente en
el minuto 24:34 del programa fue: “de manera tal que lo correcto es hombre y
mujer, Adán y Eva, sino, no existiéramos. Es el hombre y la mujer.
No es un tema religioso. Es un tema de garantizar la supervivencia de la humanidad y de qué es lo
correcto. Es incorrecto lo demás, don Alvaro.” Asimismo, entre los minutos
23:35 a 23:58 manifestamos “el problema
no son ellos. El problema es lo que plantean. Una familia que no es
posible porque Dios hizo a Adán y a Eva. Y no es un problema solamente
religioso, es un problema de carácter fisiológico y de carácter incluso
antropológico, de carácter científico…”
Por todas las falsedades y tergiversaciones que los
grupos pro gay han señalado por algunos medios y redes sociales, hacemos la
presente aclaración. Estamos convencidos que son las grandes mayorías
nacionales las que deben decidir si se establece o no el matrimonio entre
personas del mismo sexo en Panamá y para ello reiteramos nuestra propuesta –
hecha en dicho programa – de que hagamos con las elecciones de mayo del 2019
una consulta nacional al pueblo, con dos papeletas: una que diga sí al
matrimonio gay y otra que diga no al matrimonio gay. Y que la mayoría decida y
no sea la minoría la que nos imponga condiciones. Reiteramos que, con más valor y entereza,
seguiremos defendiendo el verdadero y único matrimonio, la vida y la familia,
convencido no solo desde nuestro punto de vista cristiano, sino también desde
el punto de vista antropológico, anatómico, científico y fisiológico, porque si
un día un hombre y una mujer – cualquiera que hubiesen sido sus nombres – no se
hubiesen unido, hoy no existiera la especie humana.
Jueves 8 de febrero de 2018
Doctor en Derecho
(Especializado en Derecho Constitucional)
Universidad
Complutense de Madrid, Reino de España
Primer Defensor
del Pueblo de la República de Panamá (1997-2001)
Correo
Electrónico: iantinorib@cwpanama.net
Excelente explicación que dió en Telemetro, la tomé como referencia para mi trabajo de la U.
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